En esta ocasión os hablaremos de los dildos de cerámica, ideales para todo tipo de juegos en pareja o en solitario. Resistentes, delicados, firmes y acuáticos, son el compañero perfecto para los más fogosos.
Qué son los dildos de cerámica
Los dildos de cerámica comparten muchas características con los consoladores de cristal:
- Muy resistentes. Tienen un elevado punto de fusión, de manera que no lo podemos derretir ni estropear con altas ni bajas temperaturas. No se daña, por lo que nos durará toda la vida.
- Sencillos de limpiar y mantener. Al igual que con los dildos de cristal, los dildos de cerámica no son porosos, por lo que no nos quedarán bacterias escondidas después de limpiarlo. Podemos hacerlo con agua y jabón o con limpiador de juguetes, muy fácil y quedan perfectamente desinfectados.
- Hipoalergénicos. Al ser de cerámica, no producen ningún tipo de alergia ni reacción el la piel, perfectos para personas sensibles a otros materiales.
- Contraste. Se adapta rápidamente a tu temperatura corporal y, gracias a su material, ofrecen sensaciones excitantes al permitirte jugar con el contraste de temperatura enfriándolo o calentándolo. E incluso hay algunos dildos de cerámica que son huecos, con un tapón en la base, especiales para llenarlos de agua y probar sensaciones nuevas.
- Water resistant. Como los relojes Casio, estos dildos se pueden sumergir tanto, o más, pero supongo que no iremos a practicar snorkel con ellos, pero sí es genial llevarlo a la piscina o a la playa
- Firmes y suaves. Los dildos de cerámica no pesan mucho, son firmes y a la vez delicados. Su superficie es completamente lisa, aunque tenga ondulaciones, por lo que desliza mucho mejor sin necesidad de usar mucho lubricante. Excepto cuando se trata de plugs, que el ano no tiene lubricación propia, acordaos.
Y en variedad de colores no les gana ninguno, ¡los hay para todos los gustos!